domingo, 24 de junio de 2007

SACRILEGIO










Era un ángel

Descendió en el calor del mediodía,
calzado de nubes,
desprendiendo polvo de estrellas
de sus alas blancas

Eran soles sus ojos

Destellos que todo lo traspasan,
desnudaron mi cuerpo,
sangraron mi alma
dejándome indemne a su entera potestad


Eran cálices sus manos

Me volqué toda en deseos,
inmolada como víctima propicia
me hice sangre ceremonial,
y fui bebida hasta saciarle

Era un trueno su voz

Sus gemidos lujuriosos
derrumbaron mis murallas
y me abatieron como a Jericó
sin sonido de trompetas

Era una espada su lengua

Doble filo que penetra
humedad que me reseca
calando mis abismos y hendiduras

Era un ángel
Y encontró un demonio en mi

7 comentarios:

Débora Hadaza dijo...

Wow!! Presentame un angel asi por piedad!! jaja excelente texto

Horacio Fioriello dijo...

jajaja, me causa gracia el comentario de Deby, tu poema : un derroche de erotismo lujurioso...
exelente!

besos
Horacio

César González dijo...

Nunca está más cerca la mujer de alcanzar a las deidades, que cuando razga con las uñas la divinidad, tras ese trance metafísico al cual la carne nos conduce.
El hombre, varios pasos detrás, nunca está tan cerca de lo divino más que a través de esa gloria que nos transmiten ustedes, mujeres.
Cuentame, amiga mía... ¿Cómo es el paraíso?

MALUCILLAYCAFÉ dijo...

débora, te voy a hacer la solicitud a ver si te asignan uno, por estos días estan escasos....

gracias horacio por tu siempre bienvenida visita, me gusta que te acerques a mi rincón virtual


cesar, déjame revisar mi agenda y te programo un tour

Jesús Ademir Morales Rojas dijo...

Ya había leído este bello poema, dejame añadir a lo que ya te había comentado que me recuerda los poemas de William Blake, en donde demonios y ángeles se juntan y se confunden.

Es una transgresión deliciosa mística y pecadora, como si volviera a escondidas la primera pareja por la manzana mordida y abandonada entre la hierba, y la hurtara entre risas complices para luego comerla juntos en el lecho marital.

-y por cierto, si se puede yo también quisiera unirme al tour promocionado :)-

Saludos desde México.

Anónimo dijo...

Tu sola lectura es montar en lomo de gacela y galopar a tu aire por la sábana entrando y saliendo incesantes al valle comiendo mamey zapote mango ciruela higos hasta que nos sorprende la exquisita sensación de compartir semejantes abismos y humedales por los siglos de los siglos amen

MALUCILLAYCAFÉ dijo...

Aldemar, siempre bienvenida tu visita y mucho mas tu cuidadosa lectura de mis letras que me impulsan a depurar cada día estos intentos de poesía

Amigo anónimo, despues de leer la descripción que haces de este verso se me hace urgente buscar el paraíso, intuyo que se halla oculto en alguna selva de nuestro trópico colombiano