Ayer la noche dijo
que era extenso el nocturno sin sus besos
Susurrante
cantó al dolor que laceró la herida
y labró surcos profundos
en el alma
cantó al dolor que laceró la herida
y labró surcos profundos
en el alma
Derrotada,
detuvo la noche en su periplo
sobre el gastado borde de mis sábanas
detuvo la noche en su periplo
sobre el gastado borde de mis sábanas
Abrazó su tristeza
en mis almohadas
y dejó en los rincones de mi alcoba
un denso aroma
a flores muertas
en mis almohadas
y dejó en los rincones de mi alcoba
un denso aroma
a flores muertas
No hay comentarios:
Publicar un comentario