Para olvidarte
desterraré tus gemidos de mi cama
enterraré la humedad de tu cuello
que caía en gotas sobre el nido de mi pecho
exiliaré el suave toque de tus manos
reinventando la curva de mis caderas
Voy a secar el lago de tu vientre
donde me sumergía hasta caer
en algo parecido al sabor de la muerte
en una tarde de abril
bajo un cielo que canta
Con la navaja presta
cortaré la cabellera de rapunzel
que aun pende en la ventana
Es hora de apagar la antorcha que alumbraba tu retorno
Hoy cerraré con doce cadenas el abismo de mis dudas
y extinguiré la hoguera que esperaba
-ansiosa-
tu llama para avivar la fuerza de sus brasas
Luego
le pediré asilo al silencio
y desde allí asistiré al derrumbe de los días
6 comentarios:
... y por qué me vas a hacer todo eso mala muhhhééé?
J. J.
Buena poética...
y tus palabras que me vuelven a recordar lo arduo y lacerantes que vienen a ser nuestros esfuerzos para desterrarnos las huellas y dar paso a ese olvido que nunca llega...
Saludos...
jj, yo seeeeeeeee, yo seee que te mereces esto y massss
Jorge, me di una vuelta por tu blog, he añadido tu vínculo a mi página, para acceder mas fácilmente, gracias por estar
que hermoso es y sabes? si me dices como se hace eso yo te juro que tambien lo hago, un abrazo señora!
es un camino complejo Débora, pero te libera de las cargas
saludos colombianos
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