martes, 29 de mayo de 2007

CIEN FANTASMAS



















Rey y Reina, Henry Moore

Mis pies golpean el concreto frío
al compás de un corazón ávido,
agitado por los sueños

Cien fantasmas asoman en la esquina,
desde los zaguanes
me espía la sombra de mis dudas,
el eco de los penitentes grita en mi oído
un decálogo de culpas

Tras de las persianas
unos ojos anónimos vigilan mi angustia de mujer famélica
Las luces se rompen en mi cabeza,
amenazando con desequilibrar lo poco de cordura que me resta

Repaso mi cabello
indomable con el viento de la tarde que agoniza:

en cada hebra un beso contenido,

un ruego silenciado,

un amor que se pierde entre el humo y la prisa

Traigo un adiós
que no alcanzo a pronunciar
suspendido del ruedo de mi falda
y mil susurros de amor prometiendo el paraíso.
aguardándote en el valle de mis pechos

Evito tus ojos:
Ocultan toda nuestra historia
que no quiere ser leída

Evitas mis ojos:
Encubren todo el dolor
que no quiere ser removido

Impotentes,
nos sentamos el uno junto al otro
aunando la miseria de sabernos perdidos

3 comentarios:

Débora Hadaza dijo...

Mujer que hermoso escribes! queria escoger una de tus frases mas exquisitas pero entonces debí haber citado todo el poema.

DANIEL JIMENEZ T. dijo...

Exquisito...

MALUCILLAYCAFÉ dijo...

llevate lo que quieras, estoy en oferta

gracias por la visita