domingo, 9 de noviembre de 2008

YO SÉ QUE ESTUVE ALLI

Aún hago parte de tus horas de insomnio,
mientras buscabas mi quietud entre las sábanas,
y de tus horas claras,
catando mi presencia con susurros
y humedades derrochadas

sembrada en tu boca
como una verdad cierta,
fui tu faro y tu caverna,
la salvación y la condena

Y sé que continúo presente,
aunque tu boca calle y tus manos mientan,
tejiendo caricias en pieles que te son ajenas

-contando historias viejas como si fueran nuevas-

repasandola soledad y el vacío
que habita en tus palabras
y toda la agonía de esa vida tuya,
echada a perder en la amargura

2 comentarios:

Anónimo dijo...

letras melancólicas las que dejas nacer en estos versos

a veces estamos sin estar y nos vamos pero seguimos presentes

Anónimo dijo...

Estas enamorada de alguien que se fue fisicamente y calla pero en tu corazon esta presente,muy bello.